Mmmmm… ¡Trufas de chocolate! Conozco pocas personas que se puedan resistir a la cremosidad e intensidad de sabor de este pequeño dulce. Y, si además incluye la gracia de ese toquecito de licor, es capaz de caer en la tentación hasta el más fuerte.
Lo que más me gusta de estas trufas de chocolate caseras es lo fácil que son de hacer y lo lucidas que resultan. Es un dulce muy versátil y se puede elaborar para multitud de ocasiones. Si queréis sorprender a vuestros invitados, con las trufas de chocolate tendréis el triunfo asegurado. Y también resultan ideales para regalar. Pero lo bueno que tienen es que son tan fáciles de preparar que no hace falta esperar a una ocasión especial para hacerlas. Además, si tenéis niños en casa, seguro que estarán encantados de echaros una mano. En ese caso, acordaos de no añadirle alcohol.
Recetas de trufas de chocolate hay miles y cada combinación de ingredientes le aporta un matiz diferente a la trufa. En Código Cocina publico la que suelo elaborar yo, con el sabor predominante del chocolate negro, pero si tenéis una que ya os funciona, ¡perfecto! También hay infinidad de formas de decorarlas. Yo he elegido la más clásica y sencilla, pero aquí es cuestión de echarle imaginación.
¿Queréis saber ya cómo se hacen estas trufas de chocolate negro? Pues vamos a ver la receta.
Utensilios para elaborar trufas de chocolate negro
- Cápsulas de papel pequeñas para presentar las trufas (opcional)
- Un recipiente para derretir el chocolate al baño María
- Un recipiente más amplio que el anterior (el que va a contener el agua)
- Unas varillas de cocina
- Una fuente amplia
Ingredientes para hacer trufas de chocolate negro
- 500 g de chocolate negro fondant
- 100 g de mantequilla
- 350 g de leche condensada (un bote de los pequeños tiene 375 g, para que os hagáis una idea)
- un buen chorro de brandy (u otro licor que os guste)
- fideos de chocolate, cacao amargo en polvo, coco rallado…. Lo que más os guste para la cobertura.
Elaboración paso a paso para hacer trufas de chocolate negro
- Derretimos el chocolate al baño María. Recuerda que no debe entrar nada de agua dentro del cacharro donde tenemos el chocolate. Puedes repasar mis consejos para hacer bien el baño María si lo necesitas.
- Cuando el chocolate comience a derretirse, añadimos la mantequilla.
- Vamos moviendo la mezcla de chocolate y mantequilla con la ayuda de las varillas hasta que todo esté completamente fundido. Nos aseguramos de que no haya quedado ningún trozo de chocolate sólido en el fondo.
- Retiramos del fuego y dejamos templar unos minutos.
- Agregamos la leche condensada y batimos hasta que todos los ingredientes estén bien integrados.
- Añadimos el chorro de brandy, o del licor que hayamos escogido, y terminamos de mezclar.
- Ahora hay que verter la mezcla en una fuente amplia y dejarla enfriar en la nevera durante una hora, al menos.
- Mientras se enfría el chocolate, preparamos los ingredientes con los que vamos a envolver las trufas de chocolate.
- Cuando el chocolate esté solidificado, cortamos su superficie con un cuchillo, formando cuadraditos. Esto nos ayudará a darle forma a las trufas y que todas sean más o menos del mismo tamaño.
- Vamos cogiendo cada porción con la ayuda de una cuchara y damos forma esférica a cada trufa.
- Por último, rebozamos cada trufa con su cobertura y las presentamos en capsulitas de papel de las pequeñas. Esto es opcional, también se pueden presentar en una fuente
Consejos para hacer las trufas de chocolate negro
- Utilizad guantes de uso alimentario para bolear las trufas. Además de ser mucho más higiénico es muy cómodo, pues el chocolate que se va derritiendo con el calor de las manos no se nos queda pegado. Merece la pena tenerlos en casa.
- La cantidad de licor que hay que agregarles depende del gusto de cada persona y del momento de la degustación de las trufas. Por ejemplo, si es para una merienda familiar, yo les añado un chorrito discreto, pero si voy a llevar las trufas de chocolate a una fiesta de amigos… ¡soy bastante más generosa!
- Otro consejo en relación al alcohol: procurad que no sea de mala calidad, pues eso se acaba notando. Yo les he puesto brandy, que es uno de los licores que mejor combina con el chocolate, pero se puede sustituir por whisky o kirsch (licor de cereza).
- Existe otro buen truco para bolear las trufas cómodamente. Consiste en meter la mezcla de chocolate en una manga pastelera e ir haciendo montoncitos con ella sobre un papel de horno. A continuación los introducimos en la nevera y, cuando estén firmes, podremos hacer las trufas con mucha facilidad.
- Lo más adecuado es conservar las trufas en la nevera, especialmente durante los meses de más calor. Para degustarlas, recomiendo sacarlas una media hora antes de la nevera para que se atemperen. Así podremos disfrutar de toda la intensidad y aroma del chocolate.
- Las trufas de chocolate negro se congelan estupendamente. De hecho, es una buena idea tener unas cuantas congeladas y sacarlas si nos ha surgido la ocasión de degustarlas.
Más ideas para decorar trufas de chocolate negro
- Yo os he propuesto tres formas de envolver o cubrir las trufas de chocolate, pero es solo una sugerencia. También quedan muy bien con coco rallado o crocanti de almendras (que se vende en los supermercados ya envasado). O, incluso, unos fideos de chocolate blanco, en este caso.
- Podéis optar con cubrir las trufas con más chocolate también. ¿Cómo? Pues muy fácil: con un ganache de chocolate. En ese caso habría que bañar cada trufa en el ganache y dejarla reposar hasta que cuajase. El resultado es un dulce parecido a un bombón.
para cuantas unidades es la receta
Salen unas 25 o 30