Este pudin de pan, pasas y nueces es la solución perfecta para dar una segunda oportunidad esa bollería que se ha quedado dura o un resto de pan que nadie se quiere comer. No obstante, y aunque sin duda es una receta de aprovechamiento ideal, este delicioso pudin es mucho más que eso.
El pudin de pan es un postres más ricos y versátiles. Un dulce suave, delicado y buenísimo, que seguro que durará bien poco en tu nevera. Para hacer este pudin de pan, pasas y nueces puedes echar mano de cualquier resto de pan o bollería que tengas por casa: pan de molde, pan de barra, cruasanes, mediasnoches… El sabor del pudin cambiará ligeramente en función de lo que elijas, pero estará siempre riquísimo.
El pan, el ingrediente característico de este dulce, le aporta esa consistencia parecida a la de flan, pero un poco más firme. Para hacerlo más rico aún, yo le he añadido unas cuantas nueces y unas uvas pasas, pero se puede prescindir de ellas o cambiarlas por otras frutas y frutos secos, como avellanas, ciruelas pasas, etc.
¿Quieres saber cómo hacer pudin de pan, pasas y nueces? Pues aquí tienes la receta explicada paso a paso.
Utensilios necesarios para hacer este pudin de pan duro
- Un molde de cake (de los alargados). El que ves en las imágenes tiene 28 cm de largo.
- Una cazuela para hervir la leche
- Un colador para colar la leche
- Una sartén para hacer el caramelo
- Un recipiente para mezclar la crema del pudin
- Unas varillas para batir los huevos
Ingredientes para hacer el pudin de pan, pasas y nueces
- 1/2 l de leche entera
- 4 rebanadas de pan de molde sin corteza (o unos 120 g aproximadamente de pan de barra o bollería)
- 140 g de azúcar
- 4 huevos L
- 60 gr de uvas pasas
- 60 gr de nueces picadas
- 1 naranja
- 1 limón
- 1 rama de canela (si no tenemos, 1 cucharadita de canela en polvo)
- 1 cucharada de esencia de vainilla o azúcar vainillada
- 6 cucharadas más de azúcar para hacer el caramelo
Cómo hacer un pudin de pan, pasas y nueces
- Para hacer el pudin de pan y pasas, primero hay que pelar la naranja y el limón, no sin antes haberlo lavado muy bien. Si utilizas un cepillo de cocina, mucho mejor. Pélalos con cuidado de no llevarte nada de la parte blanca, pues es un poco amarga.
- Lo siguiente será infusionar la leche, es decir, aromatizarla con la naranja, el limón y la canela. Para ello calienta la leche hasta que esté a punto de hervir, retírala del fuego y añade las pieles de los cítricos y la canela. Calienta la mezcla a fuego suave otros 10 minutos, retírala y déjala templar. Antes de usarla cuélala.
- Precalienta el horno a 180 ºC.
- Lo siguiente es hacer el caramelo. En una sartén echa las 6 cucharadas de azúcar que habías reservado para el caramelo, un par de cucharadas de agua y unas gotas de zumo de limón. Ahora, a fuego medio y sin tocarlo ni removerlo, deja que el azúcar comience a tomar el típico tono dorado del caramelo. Cuando veas que el azúcar ya presenta un color rubio puedes removerlo para unificar su textura.
- Cuando el caramelo esté listo, viértelo dentro del molde y repártelo por las paredes del recipiente. Es importante que esta operación la hagas con rapidez, pues en cuanto el caramelo comienza a enfriarse se vuelve sólido y no resbala por el interior del molde.
- Ahora hay que partir el pan duro o la pieza de bollería que hayas elegido en trocitos y añadirlo a la leche previamente colada para que se ablande.
- En otro recipiente, bate los huevos y el azúcar. Añade también la esencia de vainilla.
- Incorpora a esta mezcla el pan remojado en la leche y mézclalo suavemente. Parte las nueces en trozos pequeños y añádelas, junto con las pasas.
- Vuelca la mezcla dentro del molde.
- Este pudin se cocina al baño María. Para hacerlo tendrás que introducir el molde de cake en otro más grande lleno de agua. Introduce el molde con el baño María en el horno y hornea a 180 ºC durante 40 minutos aproximadamente. Cuando haya pasado este tiempo, comprueba que está cocinado introduciendo un palillo o una brocheta. Si al final de la cocción ves que se está dorando la superficie en exceso, puedes cubrirlo con un poco de papel de aluminio o papel vegetal.
- Saca tu pudin de pan del horno y déjalo templar un poco. Cuando se haya atemperado guárdalo en la nevera hasta el momento de su degustación.
Consejos para preparar pudin de pan, nueces y pasas
- En una receta de pudin de pan, o budín de pan, no puede faltar el caramelo. Si quieres ahorrar algo de tiempo, usa uno ya comprado, pero queda mucho más rico si lo elaboramos nosotros mismos. Le aporta un gusto especial.
- Intenta que los tropezones, en este caso pasas y nueces, queden bien distribuidos por el molde una vez hayas vertido la mezcla. Es decir, que no se acumulen todos en una zona del pudin.
- ¿Es necesario el baño María? Sí, afecta a la textura del postre. Los púdines, al igual que los flanes, requieren una cocción lenta y uniforme, para lo que el baño María resulta ideal. Si vas a usar un molde desmontable asegúrate de que no le entra nada de agua. Para ello, forra la parte inferior del molde con papel film o de aluminio.
- Una vez esté listo el pudin, respeta el tiempo de enfriado y reposo, pues es cuando el pastel se compacta y toma cuerpo. Si lo intentas desmoldar antes de tiempo puede que se te rompa.
- Adapta esta receta de pudin casero a tu gusto o a los ingredientes que tengas en casa. ¿No tienes nueces? Incorpora otro fruto seco: pistachos, avellanas, anacardos… Y lo mismo ocurre con las pasas, puedes sustituirlas por dátiles, orejones, ciruelas…
Sugerencias de presentación del pudin de pan, pasas y nueces
Como has visto, hacer pudin de pan con pasas es bien fácil, así que no tienes excusas para no prepararlo. Además, este tipo de pasteles ganan en sabor y textura de un día para otro, por lo que es un postre ideal para prepararlo de víspera. Para disfrutar plenamente de su sabor te aconsejo que lo saques unos minutos antes de la nevera. Así no estará demasiado frío.
Puedes servirlo acompañado de un poco de nata, crema chantilly o una bola de helado de vainilla. Solo también está muy rico y puede constituir un desayuno perfecto o una deliciosa merienda. No te olvides de regar el pudin con una cucharadita del caramelo que queda en el fondo del molde.
También puedes realizar este pudin en porciones individuales. Para ello utiliza flaneras de las de toda la vida y sirve cada ración decorada con nata, helado, unos frutos del bosque, una ramita de menta… Verás qué vistoso queda.