Las papas con choco es uno de los guisos marineros por excelencia. Típica de Andalucía, especialmente de la provincia de Huelva, esta receta de patatas con sepia me recuerda a esas largas comidas de verano cerca del mar. En cualquier caso, no es necesario esperar a la época estival para disfrutar de esta deliciosa y tradicional receta.
Si eres seguidor del blog sabrás que de vez en cuando me encanta echar mano de guisos y platos de siempre. Las patatas guisadas con bacalao o el bonito con tomate son otras de las recetas tradicionales que más me gusta preparar. Si no eres mucho de pescado, te propongo un rico pollo en pepitoria. En cualquier caso, se trata de platos fáciles de preparar que, aunque suelen requerir algo de tiempo, dan como resultado bocados deliciosos.
En este guiso el protagonista es el choco, el cual también se conoce como sepia o jibia. Aunque también es un cefalópodo, no hay que confundirlo con el calamar o el pulpo. El choco tiende a ser un poco más duro que el calamar, por lo que hay que darle cocciones más largas para que quede tierno.
¿Quieres ver cómo preparar unas patatas con choco sencillas y muy ricas? Pues toma nota de la receta.
Ingredientes para hacer papas con choco. Cantidades para 4 raciones
- 600 g de choco limpio
- 700 g de patatas
- 1/2 vaso de vino blanco
- 1 cebolla grande
- 1 pimiento verde italiano
- 5 cucharadas de tomate triturado
- 2 dientes de ajo
- 1 hoja de laurel
- 1/2 cucharadita de pimentón dulce
- 500 ml de caldo de pescado
- aceite de oliva virgen extra
- sal
Cómo hacer papas con choco. Preparación paso a paso
- En primer lugar, asegúrate de que el choco está bien limpio. Retírale las telillas que tiene por dentro y la parte del pico.
- Trocea el choco y resérvalo. Ten en cuenta que merma bastante al cocinarlo, así que pártelo en trozos de unos 2 cm de lado .
- Por otro lado corta finamente los dientes de ajo. También corta en brunoise la cebolla y el pimiento verde, es decir, en pedacitos pequeños.
- En una cazuela amplia vierte un chorro de aceite de oliva y pocha a fuego suave el ajo y la cebolla. Echa una pizca de sal para que la verdura sude y suelte el agua más deprisa. Pasados unos 5 minutos incorpora el pimiento verde y deja que todo se sofría durante unos 10 minutos más. Los vegetales debe ponerse bien blanditos.
- Añade el tomate triturado y cocínalo durante unos minutos hasta que se evapore el agua.
- Sube un poco la intensidad del fuego, vierte el vino blanco y deja que se consuma el alcohol (tardará 2 o 3 minutos)
- Ahora añade el choco cortado. Incorpora el caldo y la hora de laurel y deja que todo se cocine a fuego bajo durante unos 15 minutos.
- Incorpora las patatas, que habrás pelado y chascado en trozos previamente.
- Tapa la cazuela y deja que el guiso de patatas y sepia se cocine durante 25 o 30 minutos más o menos o hasta que las patatas estén tiernas.
- Finalmente, añade el pimentón dulce y rectifica de sal. Si quieres, espolvorea un poco de perejil fresco picado.
Consejos para preparar patatas con choco
El tiempo de cocción que te indico es aproximado. Este depende del tipo de patata que uses, del tamaño de los trozos, de la intensidad del fuego… Por eso, lo ideal es ir probando el guiso hasta ver que tanto las patatas como la sepia están en su punto.
Cuando preparamos unas patatas guisadas con calamar, o con cualquier otro ingrediente nos gusta que el caldo esté ligeramente espeso. Esto lo conseguimos cortando las patatas de la manera adecuada. Así, estas soltarán parte de su almidón, lo que espesará el caldo. Las patatas deben ir chascadas, no cortadas, es decir, una vez que hayamos iniciado el corte, tiramos un poco del cuchillo para que el resto de la patata se rompa.
Para que el caldo espese aún más, destapa el recipiente donde estás cocinando tus papas con choco durante los últimos minutos de cocción.
¿Se puede congelar el guiso de papas con choco? No, no se puede congelar. los guisos que llevan patata se descongelan muy mal. En cualquier caso, puedes guardar el plato durante 2 o 3 días en la nevera, bien tapado. Es más, este tipo de platos de cuchara ganan sabor con el reposo.