Macarrones con berenjenas, receta de pasta fácil

Esta receta de macarrones con berenjena destila sabor mediterráneo por los cuatro costados. Es fácil de hacer, saludable y es perfecta para que disfrute toda la familia. Toma nota de cómo preparar pasta o macarrones con berenjenas y tomate.

Pasta con berenjena y queso, una receta sencilla con ingredientes muy sabrosos

Si tuviera que quedarme con una gastronomía fuera de nuestras fronteras, sin duda sería la italiana. Estoy enamorada de sus sabores, sus aromas y de cómo cuidan sus ingredientes. Uno de los que más me gusta es la berenjena. En el país transalpino están especializados en sacar lo mejor de este vegetal, lo cual me encanta.

Esta receta de pasta con berenjena y cebolla es de las que más suelo preparar en casa. Casi siempre tengo estos ingredientes y no me cuesta nada hacerla. Podríamos decir que es una versión de la famosa pasta alla norma con mi toque personal. Esas aceitunas negras y ese tomate seco no están en la receta original, pero aportan un sabor delicioso.

¿Te animas a probar esta receta de macarrones tan saludable y sabrosa? Con todo lo que te he contado seguro que sí. Echa un vistazo.

Cómo hacer pasta con berenjenas fácil

Prepara la salsa de tomate

1. Pica todos los vegetales como verás en las fotos de abajo. La cebolla, el diente de ajo y las zanahorias irán cortados en cubitos muy pequeños, ya que en principio no vamos a triturar la salsa. La berenjena, una vez bien lavada, va cortada en dados más grandes. En cuanto a las aceitunas negras y los tomates secos, córtalos en trozos del tamaño que prefieras.
2. Vierte un buen chorro de aceite de oliva en una cazuela o sartén. Pocha la cebolla y el ajo a fuego medio durante 5 minutos más o menos. Añade un poco de sal para ayudar a que la cebolla sude.
3. Incorpora las zanahorias cortadas en daditos bien pequeños y deja que se cocine todo durante 15 minutos más o menos a fuego suave. La zanahoria debe quedar bastante blandita. Remueve de vez en cuando para que no se pegue nada al fondo de la cazuela.
4. Seguidamente, añade el tomate triturado, tapa el recipiente y deja que se haga durante otros 10 minutos aproximadamente. Para que salga el vapor resultante y la salsa se vaya reduciendo, deja una rendijita.
5. Añade las berenjenas cortadas, vuelve a tapar y cocina todo hasta que la berenjena esté tierna. Ya tenemos lista la salsa de berenjenas y tomate.

Cuece la pasta y termina tu receta de macarrones con berenjena

1. Por otro lado, cuece la pasta en abundante agua con sal según los minutos que indique el paquete. Recuerda que no deberás añadir aceite. Por aquí te dejo algunos consejos para cocer la pasta correctamente.
2. Cuando los macarrones estén cocidos, añádelos al recipiente donde tenías la salsa y remueve para que se integren los sabores. Si es necesario, mezcla la salsa con parte del agua de cocer la pasta para hacerla más ligera y ayudar a que ligue. Corrige el punto de sal.
3. Finalmente sirve los macarrones con berenjenas recién hechos. Espolvoréalos con el queso parmesano rallado y unas hojas de albahaca fresca. ¡A disfrutar!

Consejos para hacer macarrones con berenjenas

Evidentemente puedes hacer las sustituciones de ingredientes que quieras. Puedes cambiar las aceitunas negras por verdes o prescindir del tomate seco si no lo encuentras por ninguna parte.

Independientemente de los ingredientes que uses, lo más importante en un plato de pasta es dejarla en su punto ideal de cocción. La pasta nunca se debe sobrecocer, sino que se debe dejar al dente. Esto significa que debe ofrecer un puntito de resistencia en el momento de morder; no puede estar completamente blanda.

Si puedes, usa una passata di pomodoro en lugar de tomate triturado normal y corriente. La diferencia entre la passata y el tomate triturado es que la primera está tamizada, de manera que su textura es mucho más suave y fina. Busca la passata en supermercados grandes o en establecimientos especializados en productos italianos.

Te recomiendo que degustes tus macarrones con berenjenas nada más prepararlos, cuando aún están calentitos. Con el paso del tiempo, la pasta comienza a absorber el líquido de la salsa y pierde textura. En ningún caso se puede congelar.