Harina, mantequilla y azúcar. No necesitas más para preparar unas riquísimas galletas caseras con las que darte un capricho dulce. ¿Quieres saber cómo se hacen? No te pierdas esta receta de galletas con tres ingredientes. Más fáciles, imposible.
Receta de galletas con tres ingredientes, sin huevo
Abizcochadas, crujientes, tipo cookie, con chocolate, con frutos secos… En galletería las combinaciones de texturas y sabores son casi infinitas. Existen tantas recetas de galletas como ganas tengamos de jugar con sus ingredientes y proporciones. Unas son más complejas, otras más sencillas, pero todas tienen el encanto de lo hecho en casa.
La receta que hoy nos ocupa es de las más fáciles que encontrarás. Se trata de unas galletas de mantequilla con tres ingredientes que te sorprenderán por su sencillez, sabor y textura. Son perfectas para iniciarse en esto de la repostería, pues el margen de error es mínimo. Y es que la receta se basa en una proporción de ingredientes muy fácil de recordar: 3-2-1. Así de simple.
Para elaborar estas galletas no necesitas cortadores ni utensilios extraños: solo tus manos para darles forma y el horno para cocerlas. Por comodidad puedes usar un robot de cocina para preparar la masa, pero no es imprescindible. Son tan sencillas que hasta los más pequeños de la casa pueden ayudar. Tampoco requieren tiempo de reposo, por lo que las tendrás listas en un momento.
Por otro lado, al morder una de estas galletas notarás una textura ligeramente arenosa, que se deshace en la boca. Esta consistencia, en parte, es debida a la ausencia de huevo entre sus ingredientes, lo que las convierte en un dulce apto para quienes no puedan tomar este alimento. Otro punto a su favor.
Si te gustan las recetas de galletas caseras sencillas, en Código Cocina encontrarás unas cuantas. Te recomiendo mis galletas de limón caseras, igual de fáciles que estas, o mis cookies de naranja, que también quedan muy ricas. Si prefieres alguna receta más elaborada, puedes echar un ojo a las galletas Linzer o a estas crujientes galletas de albaricoque y almendra.
Ingredientes para hacer galletas fáciles de mantequilla. Cantidades para 20 unidades
- 300 g de harina de trigo todo uso
- 200 g de mantequilla
- 100 g de azúcar blanca
Cómo hacer galletas con tres ingredientes
- Empieza precalentando el horno a 180 ºC y cubriendo la bandeja del horno con una lámina de papel vegetal.
- Por otro lado, bate la mantequilla con el azúcar hasta que adquiera un tono blanquecino y una textura ligeramente esponjosa. La mantequilla debe estar blanda, en textura pomada, pero no derretida. Yo he usado una amasadora, pero puedes hacerlo en un robot de cocina tipo Thermomix o a mano.
- Añade la harina tamizada y mezcla a velocidad baja hasta que esté integrada. Notarás que la textura queda suelta, arenosa. Es así.
- Ahora toma porciones de masa con las manos y forma bolitas de igual tamaño. Verás que la masa se amalgama con facilidad, pero sin quedar pegada a las manos.
- Aplasta ligeramente las bolitas procurando que todas queden de forma similar. Deposítalas sobre la bandeja del horno. La masa rinde para 20 unidades, así que las puedes hornear todas en la misma bandeja.
- Hornea a 180 ºC durante unos 15 minutos o hasta que las galletas comiencen a dorarse por los bordes. Estas galletas son más bien blanquitas, no esperes que se tuesten por completo porque, en ese caso, se estarán quemando.
- Sácalas del horno y, cuando ya no quemen, pásalas a una rejilla para que se enfríen por completo. Ya has visto que son unas galletas fáciles y rápidas de hacer, así que manos a la obra con ellas.
Más consejos para hacer galletas de mantequilla fáciles
Midiendo bien las cantidades, la masa debería tener la consistencia adecuada, es decir, ni se debería pegar a las manos ni estar demasiado seca. No obstante, si algo de esto ocurre puedes corregirlo sobre la marcha. Si la masa está muy seca, añade un chorrito de leche. Si ocurre lo contrario, que está blanda y no puedes manejarla, incorpora un poco más de harina tamizada.
La rejilla que yo he usado para enfriar las galletas es la misma que viene con el horno. No necesitas una rejilla especial para enfriar galletas.
Esta receta de galletas con tres ingredientes es tan sencilla que pocas variaciones admite. Se le podría añadir algún aroma como canela, ralladura de limón o vainilla. También podrías sustituir el azúcar blanco por azúcar moreno.
Estas galletas duran días en buenas condiciones. Para conservarlas, espera a que se enfríen por completo y guárdalas en un recipiente bien cerrado, preferiblemente de cristal o metálico. Los recipientes de plástico a veces acumulan olores y sabores.
Truco para disfrutar de tus galletas en cualquier momento
La masa de galletas congela estupendamente. Puedes aprovechar la sesión de repostería preparando más cantidad de galletas y guardándolas en el congelador una vez están formadas, es decir, sin hornear. Coloca papel vegetal entre pieza y pieza para que no se peguen.
Después, siempre que quieras disfrutar de unas galletas de mantequilla caseras recién hechas, saca una tanda del congelador y llévalas al horno directamente, sin descongelar. Tendrás que darles unos minutos más de horno, pero te quedarán igual de ricas que si las hubieras hecho del tirón.