El crumble de manzana, receta fácil donde las haya, es un postre de lo más otoñal y apetecible. Tomado templado resulta delicioso, pero también se puede degustar frío. Acompáñalo de un poco de helado de vainilla o nata montada y tocarás el cielo.
El crumble es un postre de origen anglosajón que en los últimos años se ha vuelto muy popular, pues es sencillo de preparar y riquísimo a partes iguales. Normalmente se hace con manzana, pero puede emplearse casi cualquier fruta de consistencia similar, como pera, fresas o melocotón. Incluso pueden combinarse varias.
En la lista de ingredientes no te he indicado una variedad de manzanas concreta porque lo puedes hacer con las que tengas en casa. Incluso puedes combinarlas y así disfrutar de diferentes texturas y puntos de dulzor dentro de tu crumble. Para esta receta yo he usado tres manzanas reineta y dos golden.
Las cantidades que te indico están calculadas para un molde de 24 cm de diámetro aproximadamente. Si el molde que tienes en casa es mucho más grande o mucho más pequeño deberás prorratear las cantidades para que el crumble te quede con un aspecto similar al mío.
Poco más puede decirte sobre este rico y sencillo postre, así que vamos a ver cómo hacer crumble de manzana casero.
Ingredientes para hacer crumble de manzana fácil
- 5 manzanas grandes (1,2 kg aproximadamente)
- 40 g de azúcar moreno
- 60 g de azúcar blanca
- 165 g de harina
- 100 g de mantequilla (85 g para la masa y 15 g para saltear las manzanas)
- 1 cucharada de canela
- 1 pizca de clavo molido
- ralladura de medio limón
Cómo hacer crumble de manzanas
- Comienza por preparar las masa del crumble. Para ello mezcla la harina previamente tamizada con el azúcar blanco.
- Añade la mantequilla fría cortada en cubitos (85 g) y trabájala con los dedos hasta que obtengas una mezcla cuya textura sea suelta. No debes amasar, solamente hay que ir pellizcando la mantequilla con la harina hasta obtener esa consistencia arenosa, similar a unas migas. Reserva en la nevera.
- Por otro lado, lava, pela y corta las manzanas en trozos de tamaño mediano.
- Calienta una nuez de mantequilla (los 15 g que te indico arriba) en una sartén grande. Añade las manzanas, el azúcar moreno, la canela, el clavo y la ralladura de limón. Saltea todo durante 5 o 6 minutitos, hasta que las manzanas comiencen a ablandarse. Retira del fuego.
- Coloca las manzanas en un molde de 24 cm de diámetro. Saca la masa del crumble de la nevera y reparte por encima las migas de manera uniforme hasta cubrir completamente las manzanas.
- Calienta el horno a 180º y hornea el crumble durante 30 minutos aproximadamente. Si casi se ha cumplido el tiempo de horneado y está todavía está muy blanco por encima, durante los últimos 3 o 4 minutos puedes encender el gratinador de tu horno para que la superficie quede más dorada. Si tu horno no tiene esta función, coloca el crumble en uno de los niveles superiores del horno para conseguir que tome color.
- Una vez listo, sácalo del horno y déjalo templar. Puedes tomarlo tibio o frío, como más te guste.
Consejos para hacer crumble de manzana
- Si al partir y servir el crumble se te desmorona no te preocupes, porque es así cómo se presenta. Ten en cuenta que no estamos usando nada para amalgamar los ingredientes. Es cierto que si lo dejas reposar unas horas quedará algo más compacto, pero si lo sirves recién hecho tenderá a deshacerse.
- En lugar de usar un solo molde, puedes hacer el crumble de manzana en moldes individuales. Te quedará mejor presentado, ya que no se desmoronará al servir las raciones. Solo debes tener en cuenta que, en función de los recipientes, puede que necesites un tiempo de horneado menor.
- Como te decía más arriba, el crumble es un postre muy versátil. Puedes tomarlo tanto templado como frío. Igualmente puedes servirlo solo o acompañado de helado de vainilla, nata montada o, como hacen los ingleses, con natillas.