
Esta crema de langostinos en vasitos es perfecta para servir como aperitivo, tapa o entrante. Su textura es cremosa y, su sabor, delicioso. Va decorada con una brocheta de langostino crujiente y quedará preciosa en tu mesa de Navidad.
Crema de langostinos en vasitos: un entrante ideal para Navidad
Abrir un menú navideño con una crema de langostinos o marisco es de lo más tradicional. Para darle un toque diferente, te propongo presentarla en unos vasitos pequeños que decoraremos con unas brochetas crujientes de langostino. Es una forma de emplatar la crema tan vistosa como fácil.
Con las cantidades que te facilito obtendrás unas 5 raciones pequeñas. Evidentemente, según sea el tamaño de tus vasitos, te rendirá para más o menos personas. Esto también deberás tenerlo en cuenta para preparar el número correcto de brochetitas.
Hablando de las brochetas. Para hacerlas necesitarás unos palitos de madera, preferiblemente cortos para que se ajusten al tamaño del vasito. Si no los encuentras de este tamaño, puedes cortar unos que tengas más grandes, que es lo que hice yo.
Poco más tengo que decirte de esta receta de crema de langostinos, así que vamos a ver cómo se prepara.
Ingredientes para hacer crema de langostinos en vasitos. Cantidades para 5 raciones
- — PARA LA CREMA —
- 500 g de langostinos frescos
- 1 puerro grande (solo la parte blanca)
- 2 zanahorias pequeñas
- 1 diente de ajo
- 3 cucharadas de tomate triturado
- 1 cucharadita de carne de pimiento choricero
- 50 ml de brandy
- 1 hoja de laurel
- 2 ramitas de apio (opcional)
- 750 ml de agua
- 75 ml de nata para cocinar
- sal
- pimienta
- aceite de oliva virgen extra
- — PARA DECORAR —
- 5 langostinos
- semillas de sésamo
- aceite de oliva virgen extra
- palitos de brocheta

Cómo hacer crema de langostinos en vasitos
Haz un caldo con las cabezas de los langostinos
- Vamos a empezar haciendo el caldo que servirá de base para la crema. Pela los langostinos y separa las cabezas. Haz lo mismo con los que tenías preparados para decorar, para así aprovechar las cabezas, aunque estos reservarás crudos para más adelante. También deberás retirar el intestino que tienen, esa rayita negra que los recorre longitudinalmente. En la foto verás a lo que me refiero.
- Echa un poco de aceite de oliva en una cazuela y, a fuego fuerte, saltea los cuerpos de los langostinos durante uno o dos minutos. En cuanto veas que han tomado color, retíralos y reserva.
- En ese mismo recipiente, echa las cabezas de los langostinos y cocínalas a fuego vivo durante unos minutos. Aplástalas de vez en cuando para que vayan soltado su jugo. El tostado de las cabezas le dará un sabor buenísimo a la crema.
- Seguidamente, añade el brandy y deja que se evapore el alcohol.
- Añade el laurel, el apio troceado y el agua. Si no tienes apio, puedes añadir media cebolla en su lugar. Tapa la cazuela y deja que todo cueza unos 25 minutos más o menos a fuego suave.
- Una vez esté listo, cuela el caldo resultante y reserva. Al colarlo debes presionar bien las cabezas contra el colador para extraer bien todos los jugos.



Prepara la crema de langostinos
- Lava bien el puerro y pártelo en trozos pequeños. Lava también las zanahorias, pélalas y córtalas finamente, así tardarán menos en estar tiernas. En cuanto al ajo, pártelo en láminitas.
- Vierte un chorrito de aceite en una cazuela, que puede ser en la que has preparado el caldo, y añade los vegetales. Cocínalos a fuego medio hasta que el puerro esté blando y tenga colorcito. Vigila la intensidad del fuego para que no se te queme. Para acelerar este paso, añade un poquito de sal.
- Incorpora el tomate triturado y remueve para que se fría sin pegarse. En este momento es posible que el contenido de la cazuela salpique un poco. Coloca una tapa encima si es necesario.
- Pasados unos 10 minutos, el tomate se habrá frito y se habrá evaporado su líquido. Es el momento de añadir la carne de pimiento choricero y el caldo que habíamos preparado. Tapa la cazuela y deja que cueza hasta que la zanahoria esté tierna.
- Añade los langostinos marcados, y un poco de sal y pimienta. Dale a todo un último chup chup para que los langostinos se terminen de hacer por dentro.
- Una vez tengas lista esta preparación, tritúrala hasta obtener una crema de textura homogénea.
- Finalmente, incorpora la nata y corrige el punto de sal. Si para tu gusto la crema está muy espesa, puedes añadir un poco más de agua. Reserva en la nevera.


Presenta y decora los vasitos de crema de langostinos
- Recupera los langostinos que habías dejado sin marcar al principio de la receta. Humedece ligeramente unos palitos de brocheta y ensarta con cuidado un langostino en cada uno. Los humedecemos para que no se quemen cuando cocinemos las brochetas.
- Coloca el sésamo en un plato y reboza los langostinos en él presionando suavemente con los dedos para que las semillas se peguen.
- Echa un hilo de aceite en una sartén o cazuela. Cocina los langostinos por todas sus caras hasta que estén hechos y el sésamo ligeramente dorado.
- Finalmente, distribuye la crema en unos vasitos pequeños y coloca un langostino sobre cada uno.



Consejos para hacer crema de langostinos para Navidad
- Para elaborar la crema de langostinos en vasitos yo he usado langostinos congelados, los cuales salen bastante bien de precio y dan muy buen resultado.
- Te aconsejo colar el caldo con un colador de malla bien fina o, si no tienes, a través de un paño de algodón. Así no pasará nada de tierra ni ninguna otra impureza.
- A estas cremas les suele ir bien un puntito ligeramente picante. Si quieres, puedes añadirle unas gotitas de Tabasco.
- ¿Se puede congelar esta crema de marisco? Sí, es posible. Si una vez descongelada ves que está un poco cortada, tritúrala de nuevo y volverá a su estado original.