El roscón de Reyes casero es una receta a la que todo buen cocinillas quiere enfrentarse tarde o temprano. Pero nos parece difícil que salga perfecto, ¿verdad? Pues bien, con esta receta de roscón de Reyes infalible cambiarás de opinión. Si bien es cierto que se trata de un proceso largo, pues solo el tiempo es capaz de dotar de aromas y sabores al brioche, no es nada complicado. Si sigues las indicaciones de la receta, sale seguro.
Para explicarte cómo hacer roscón de Reyes casero voy a utilizar la receta de Ibán Yarza de su libro Pan casero. Yo la he seguido paso a paso y sale muy bien, de verdad. He introducido algunas modificaciones respecto a las cantidades de ingredientes originales en función de mi experiencia personal y de mi gusto.
Como ves en las imágenes, yo realicé el amasado de los ingredientes con una amasadora. Esto agiliza el proceso y lo hace más cómodo, pero perfectamente se puede hacer a mano. Lo importante es que tengas paciencia y que amases el tiempo suficiente para obtener una masa con las características que te voy indicando.
Para la realización de esta receta es necesario que te organices un poco, ya que hay un par de pasos que deberás realizar el día de antes, como es la elaboración de un prefermento y de una leche aromatizada. No se tarda nada en hacerlos, eso es lo bueno.
Pero como no quiero adelantar acontecimientos, vamos a ver cómo hacer roscón casero paso a paso.
Ingredientes para hacer roscón de Reyes casero
- — PARA EL PREFERMENTO —
- 90 g de harina
- 60 g de leche entera
- 2 g de levadura fresca
- — PARA LA MASA —
- 110 g de leche entera
- 30 g de agua de azahar
- corteza de medio limón y media naranja
- media rama de canela
- 340 g de harina de fuerza (mejor si al menos tiene un 13% de proteína)
- 110 g de huevo (2 huevos S o M)
- 90 g de azúcar
- 15 g de levadura fresca
- 5 g de sal
- 60 g de mantequilla
- — PARA DECORAR —
- 1 huevo batido
- fruta escarchada
- almendras laminadas
- azúcar humedecido o azúcar perlado
CÓMO HACER ROSCÓN DE REYES PASO A PASO
Paso 1. Prefermento y leche infusionada
Estas dos elaboraciones las tendrás que realizar el día anterior. Solo de esta manera conseguirás un brioche verdaderamente aromático y rico en matices.
- Para preparar el prefermento deshaz la levadura en la leche y mézclalas con la harina. Amasa hasta formar una bola que guardarás en la nevera, en un recipiente bien cerrado.
- Por otro lado, en un cazo pon a hervir la leche con la media rama de canela y la piel de los cítricos. Durante la cocción parte de la leche se evaporará, pero no pasa nada. Cuando rompa el hervor retira el cazo del fuego y, sin colarlo, guárdalo en la nevera bien tapado. De esta manera la leche se impregnará de todos estos aromas. Si lo prefieres puedes traspasar la preparación a un recipiente con tapa.
Paso 2. Cómo hacer la masa del roscón
Pasadas 24 horas de reposo, más o menos, verás que el prefermento ha aumentado de volumen y tiene un aspecto esponjoso. Estará perfecto para aportar sabor y aroma a la masa del Roscón.
- Cuela la leche infusionada que tenías en la nevera y mézclala con el agua de azahar. De nuevo deberás tener 110 g de líquido. Si falta algo complétalo con un poco más de leche.
- En un bol amplio coloca la harina de fuerza, los 2 huevos, el azúcar, la levadura, la leche con el agua de azahar y la sal. Añade también el prefermento partido en trocitos. Mezcla todos los ingredientes hasta formar una masa que no se pegue excesivamente al vaso de la amasadora o a tus manos. Te recomiendo que no añadas todo el líquido al principio, pues no todas las harinas absorben la misma cantidad de humedad. Si lo añades todo al inicio corres el riesgo de que la masa quede demasiado pegajosa.
- Deja que la masa repose 10 minutos más o menos.
- Tras este reposo verás que la masa está menos pegajosa y se trabaja mejor. Amasa durante 5 minutos más, plegando la masa sobre sí misma, si lo estás haciendo a mano.
- Incorpora la mantequilla en dados. Tiene que estar blanda pero no derretida. Añade la mantequilla poco a poco mientras aprietas con la base de la mano y haces rodar la masa sobre la mesa.
- Deja reposar la masa un par de minutos y vuelve a amasar durante 10 minutos más. El resultado debe ser una masa lisa, suave y brillante. Para comprobar que la masa del roscón está lista, realiza la prueba de la membrana*.
- Una vez esté lista, bolea la masa. Esto consiste en darle forma de bola metiendo las manos por debajo de la masa y dejando la superficie de la misma lo más lisa posible.
Paso 3. Levado y formado de la masa
- Engrasa un bol con un poco de aceite o mantequilla. Mete la bola de masa y tápala con un paño. Deja que repose en un ambiente cálido (alrededor de 26 ºC) hasta que doble su volumen. En función de la temperatura de tu casa esto tardará en torno a hora y media. A más temperatura, más velocidad en la fermentación de las levaduras.
- Pasado este tiempo, saca la bola del recipiente y desgásala. Para ello aplástala suavemente con tus manos; notarás cómo va saliendo el gas que albergaba en su interior.
- Forma de nuevo una bola que tenga la superficie bien lisa y déjala reposar unos 15 minutos. De esta manera le podrás dar forma a la masa sin desgarrarla.
- Ahora vamos a darle forma de rosca. Con tus dedos realiza un agujero lo más centrado posible. Ensancha ese hueco hasta que puedas meter las dos manos y, con ayuda de la gravedad, darle forma de rosca. Intenta que el grosor de la misma sea similar por todas partes.
- Coloca el roscón sobre la bandeja del horno cubierta con papel de hornear. Procura que la forma te quede bonita, pues así es como más o menos quedará. ¿Quieres que tu roscón tenga sorpresa? Abre un hueco por la parte inferior del roscón, mete la sorpresa y séllalo bien.
- Pinta la superficie con huevo batido y deja que la masa leve durante otra hora y media. Prácticamente debe doblar su volumen de nuevo.
Paso 4. Decoración y horneado
- Una vez haya levado por segunda vez, vuelve a pintar con huevo batido la superficie de la masa.
- Decora tu roscón con fruta escarchada, guindas, almendras laminadas y un poco de azúcar humecedido con agua.
- Precalienta el horno a 180 ºC y hornea el roscón durante 25 o 30 minutos. Si ves que la superficie se dora muy rápido, baja la temperatura a 170º.
- Si lo quieres rellenar, espera a que esté completamente frío. Pártelo con un cuchillo de sierra para que se desmigue lo menos posible.
*¿Qué es la prueba de la membrana?
Esta prueba se realiza para comprobar si una masa de bollería está bien amasada o si, por el contrario, falta trabajarla un poco. La prueba consiste en estirar un trozo de masa entre los dedos y comprobar que se forma una membrana semitransparente, homogénea y resistente.
Esta membrana se forma gracias al desarrollo del gluten de la harina, el cual se produce durante el proceso de amasado. Por eso, si al estirar la masa ves que esta membrana se rompe fácilmente o no tiene un aspecto liso, deberás seguir amasando.