Bizcocho red velvet esponjoso y fácil

¿Buscas un postre para San Valentín sencillo, vistoso y muy rico? Prepara este bizcocho de red velvet y dale una sorpresa a esa persona especial. Es fácil de hacer y queda muy esponjoso. Notarás su suavidad en cada bocado.

Receta de bizcocho red velvet

El red velvet es el sabor que más triunfa en San Valentín. Ya sea en forma de cupcakes de red velvet, pastel, tarta o galleta, su llamativo color rojo lo hace perfecto para celebrar estas fechas. En esta ocasión vamos a preparar un bizcocho de red velvet esponjoso y con una miga muy tierna.

Además de tener un color muy llamativo, el bizcocho red velvet se caracteriza por su particular sabor. Este es fruto de una combinación de ingredientes determinada, como el cacao, el buttermilk, el vinagre o el bicarbonato.

Sí, has leído bien. Al red velvet se le añade un poquito de vinagre. Este reacciona con el bicarbonato y libera un gas que hará que el bizcocho esponje. Por eso no necesitamos añadir levadura química ni usar harina leudante. No alteres la receta y sigue todos los pasos, pues de lo contrario es posible que no te salga bien.

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Pasos previos para elaborar esta receta de bizcocho red velvet

1. Todos los ingredientes deberán estar a temperatura ambiente. Asegúrate de sacarlos con suficiente antelación de la nevera.
2. Precalienta el horno a 180 ºC con calor arriba y abajo y sin ventilador. 
3. Forra el molde con papel de horno o pincélalo con un poco de aceite. Yo he usado un molde redondo de 20 cm de diámetro. Pincha en el enlace para verlo.
4. Por otro lado, mezcla la leche con el zumo de limón y déjala reposando. Así la leche se cortará y conseguirás una buttermilk casera, la cual aportará mucha jugosidad y humedad al bizcocho.
5. Tamiza la harina con el cacao y déjalos reservados para cuando los necesites.

Cómo hacer bizcocho red velvet

1. Bate los huevos con una batidora eléctrica de varillas o con un robot de cocina. Puedes hacerlo a mano, pero te cansarás un poco. Cuando los huevos empiecen a blanquear, incorpora el azúcar en forma de lluvia. Bate durante 3 o 4 minutos, hasta que la mezcla esté blanquecina y aireada.
2. Añade el aceite y mezcla a velocidad baja.
3. Incorpora la pasta de vainilla y el colorante rojo.
4. A continuación, agrega la mitad de la harina y el cacao que habías tamizado al principio. Mezcla con suavidad. Si estás usando batidora o robot de cocina, hazlo a la velocidad más baja que te permita y, si lo prefieres, usa una lengua de repostería.
5. Añade a la masa la mitad de la buttermilk y mezcla otro poquito hasta integrar.
6. Repite la operación, es decir, añade la otra mitad de los ingredientes secos, mezcla y termina con el resto de la buttermilk. El objetivo incorporarlos de manera alterna es impedir que se formen grumos.
7. En este momento, no antes, mezcla el vinagre con el bicarbonato en un recipiente aparte. Verás cómo ambos ingredientes reaccionan y se forman burbujas. Incorpóralo rápidamente a la masa y mézclalo.
8. Vierte la masa en el molde ya forrado y hornea a 180 ºC durante 45 minutos aproximadamente.
9. Cuando tu bizcocho de red velvet esté cocido, sácalo del horno, desmóldalo y déjalo enfriar. Una vez esté completamente frío puedes decorarlo con un poco de azúcar glas, si quieres.

Consejos para hacer bizcocho red velvet

No tengas miedo al añadir el vinagre; lleva muy poca cantidad y no deja mal sabor en el bizcocho red velvet. Incorporar este ingrediente ácido es necesario para que reaccione con el bicarbonato de sodio. Tal y como indica la receta, debes usar un vinagre que sea suave, como el vinagre de vino blanco o el de manzana. Evita vinagre de Jerez o tipo balsámico

Una vez que hayas incorporado la mezcla de vinagre y bicarbonato, hornea la masa inmediatamente, pues si la dejas reposar un tiempo «perderá fuerza» y no subirá tanto. Por eso te recomiendo tener el molde ya preparado. La explicación química es más complicada, pero a efectos prácticos esto es lo que debes tener en cuenta.

Sigue mi consejo de incorporar el buttermilk y los ingredientes secos de manera alterna. Así evitarás la formación de grumos. Si primero añades la leche y después la harina, te constará mucho mezclarlos.

¿Qué colorante usar para hacer red velvet?

Tienes que usar colorante en pasta o en gel, pues son mucho más concentrados que los líquidos y aportan color si alterar la consistencia de la masa. Si la etiqueta indica «extra red» o «extra rojo», mucho mejor.

También serviría un colorante en polvo. Evita, sin embargo, los colorantes para chocolate. Estos son liposolubles y no nos valen en este caso.

Si nunca has usado colorantes alimentarios o es la primera vez que vas a usar una determinada marca, te recomiendo que comiences añadiendo poca cantidad y vayas incorporando más si lo consideras necesario.